jueves, 19 de enero de 2012

Pañuelos... ¡con bijoux!

 



Los pañuelos serán el must de la próxima temporada: sean gatitos ( muy pequeños y cuadrados) bandanas (los cuadrados y amplios), foulards (alargados), pashminas (largos y anchos, como para cubrir los hombros) o gigantes (los pareos de uso playero), los pañuelos junto con los sombreros de todo tipo ¡se suben a la cabeza! Esta primavera y verano son los encargados de dar forma, movimiento, color y luz a tu rostro.
Pero si te gustan tanto las bijoux... ¿qué harás con ellas?
A no desesperar: aquí van algunas ideas para seguir usando tu bijoux preferida sin dejar de estar a la moda. Y más: tu bijoux agregará ese toque de chic que hará de tu pañuelo un accesorio ultrafemenino, glamoroso, inolvidable.

Elegancia y sofisticación por mil: gafas, pañuelo a la cabeza ajustado en el cuello, y el clásico collar de perlas. ¡Wooowwww!


Pañuelo enrollado finito en varias vueltas al cuello, junto a un collar bib. Resultado: un retro avant-garde.


 
Sinergia pura: ¿cual pone más glamour acá? ¿El pañuelo... o el aro?


 
Esta vieja tapa de Vogue muestra un foulard sujetado por un broche. ¿Quien podría negar su seducción?



Hiper chic para una salida elegante: sedoso y sensual foulard sujetado con... ¡el collar!


 
Francés y algo napoleónico pero encantador: foulard atado como un moño fijado gracias a un broche-moño-ramillete que acompaña en color a las rayas del cuello y en dibujo a las "pecas" del tul del sombrero. Maravillosamente logrado ¿no?


 
Y ya sin miedo a la pareja pañuelo-bijoux, el último en una combinación irresistible para las de corazón pirata!!!! Pañuelo a la "gitana" con rastas trabadas con bijoux y tiras de cuentas gigantes... Nada mal para nosotras, ¿no?

viernes, 13 de enero de 2012

Cuellos refinados con brillo y bijoux


En la época victoriana los cuellos cobraron una importancia superlativa y se transformaron radicalmente: de ser apenas un borde del vestido pasaron a ser protagonistas principales en el atuendo elegante de cualquier mujer. Cada tanto se reinventan las formas de avivarlos y los trucos para destacarlos. Junto a los collares bib y los XXL, gargantillas, colliers estilo victoriano y pañuelos, ahora los cuellos recobran su viejo esplendor.

 

¿Qué te parecen para el after office? Seis opciones que Vogue sugirió para una insulsa camisa blanca.

 

Cuello tejido al crochet, bordado por encima con perlitas y lentejuelas: ideal para mejorar los escotes al ras de prendas sencillas.


Una bijou que funciona como un cuello postizo, creación de Cocó Chanel (1950)



Fabuloso cuello de joyería, en falsos diamantes y aguamarinas. Muy, muy bello.

Cuello-gargantilla super romántico, de muselina plisada, puntillas de encaje con apliques dorados y camafeo central.


Otro en la línea: un chabot de encaje negro sujetado por un broche de camafeo completa esta camisa de romántico look.


Infalible truco para destacar el pecho e iluminar el rostro: atar o abrochar un pañuelo de gasa ( también puede ser una puntilla ancha) a modo de importante solapa.

Esta capa con pasamanería gigante y broche a juego cubre un escote generoso. A la vez que hace de cuello o de solapa sugiere más de lo que muestra... 

Para climas destemplados: no son bufandas sino dos abrigados cuellos cuya pasamanería, puntilla y borde de piel les añaden el encanto especial que el frío parece negar.

miércoles, 11 de enero de 2012

¡Vuelve actualizada la clásica camisa blanca!


Si en el guardarropas femenino hay una prenda básica, que no le va a la zaga al LBD o pequeño vestidito negro, es la camisa blanca.
Clásica, fresca y ligera, se presta tanto para vestir elegante y formal como para vestir casual.
Como es sabido, son las prendas que acompañan a un clásico (pashmina, sweter, saco o chaqueta) y los accesorios, los que dan el "estilo". En la foto vemos una suma de "clásicos", actualizados por la forma en que se llevan y estan combinados: blue jean, pashmina al cuello, sweter ajustado, muñequera de cuero negro, como las sandalias bajas y, y... ¡Sí! ¡camisa blanca!



Camisa, pantalón y cinto blancos con tailleur en blanco roto bordado para un color-block ultra suavizado, versión 2011 de un Chanel, por supuesto.


Carolina Herrera hizo de esta prenda un must de su guardarropas: para el día, la noche y la gala, su ya esperable camisa blanca es la clave de su elegancia refinada y sin ostentación.



Aquí, ella la lleva con una pollera corta de satén turquesa con apliques de strass gigantes al tono y aros con turquesas.

¿En qué radica la gran versatilidad de la C.B.?
Una camisa blanca posibilita muchos equipos. Por sus características esenciales no solo admite muchísimas variaciones sino también formas de llevarla y combinaciones. Y por último, su color va con los otros neutros, negro, gris, marrón, beige, con los actualísimos colores netos y con todo tipo de tejidos y estampados.



Si bien esta camisa tiene un frunce distribuido a lo largo de su abotonadura delantera, con la mini de tweed gris y el cinturón de cadena y cuero tipo Chanel se convierte en la versión juvenil y chic de un clásico. 

¿Qué camisa blanca es la adecuada para vos? Una que no sea demasiado ajustada y cuyos botones delanteros no se abran. El corpiño que lleves debajo debe sujetarte bien y tener un toque sexy, porque el blanco transparenta y el riesgo es perder glamour. No hay que invertir mucho para que sea de calidad y luzca impecable for ever. DEBE estar limpia y sin arrugas. El largo de manga también es muy importante: si requiere ajustes, vale la pena que te ocupes de ello.
Luego, miles de detalles la harán única: el corte, el largo y la forma de las mangas, botones (los negros la hacen muy chic), lazos, volados, tablas, chabot, alforzas, bordados, apliques de guipure...todas son multiuso y elegantes. 



El romanticismo de esta camisa íntegramente alforzada se neutraliza con los pantalones de cuero y el largo collar que une cadena y coloridos abalorios

¿Cómo elegirla? 
Guiate por tu modo de vida y sobre todo por la forma de tu cuerpo. Por ejemplo, el cuello debe tener una forma opuesta a la forma de tu cara. Si tu cara es redonda, un cuello alargado y puntiagudo te favorecerá mucho. Para un rostro alargado, los cuellos redondeados son mejores.



La camisa blanca más femenina es la que sustituye el cuello por un lazo y es para todas y para cualquier ocasión. Esta se acompaña con gargantilla y cinturón dorado, color que siempre resalta un look blanco con suavidad. 


Para lucir más delgada, lleva las mangas por debajo del codo o hasta la muñeca.
A las rellenitas les queda mejor el largo hasta las caderas o por arriba, con delantera cruzada, y escote en V bastante profundo. En este caso evitá los recortes, volados, bolsillos y detalles voluminosos, así como las telas demasiado translúcidas o adherentes.



La reina de las camisas blancas, Carolina Herrera. Observa como en ella se cumplen estas "reglas" a la perfección.



Una versión informal de camisa romántica, dentro o fuera de ajustados leggins, con botitas y el toque retro del collar negro, bien visible para darle importancia al cuello.
Otra versión informal es la camisa XXL con leggins y balerinas.
Si la blusa tiene un cuello sin relevancia, le quedará muy bien un collar a ras del cuello (largo princesa) o un broche sujetando el botón superior.


Otra forma de darle importancia al cuello, es levantandolo. Gracias a este fabuloso collar, Carolina Herrera transforma una super clásica camisa en blusa de gala.

¿Cómo la llevarás vos?



Para el trabajo: con falda tubo a la cintura e importante collar corto, o con una pollera de corte A y cinturón ancho


... o entallada haciendo las veces de una chaqueta, con un pantalón recto a la cintura y bijou dorada.



Para una salida nocturna, unos pantalones pitillo o leggins y unos buenos aretes o falda de satén, con unas medias de encaje y tacos altísimos la acompañarán perfectamente.


Para diario, con jeans y botas o balerinas, y una cartera con correa ancha que le de un look super casual o un colgante grande que llegue hasta abajo del cuello.



Con unos shorts de cuero o de jean, escasa bijoux, medias y zapatitos abotinados, será más atrevida y street style.


Una camisa suelta y larga sobre un pantalón amplio tipo palazzo, resulta super chic.
Abajo la misma propuesta y un look totalmente diferente, con pantalones cortos de organza transparente.


Seguimos con los los looks en alza.
La camisa blanca de estilo masculino y con puños anchos, además de versátil y glamorosa es la tendencia urbana actual. Sobre todo si tienen algo de lycra que las adapta maravillosamente al cuerpo. Puede llevarse con un traje liso o a rayas, chaleco, corbata y gemelos en los puños, que la favorecerán mucho.



Un lazo con moño que se confunde con una corbata y saco sastre. Masculina y con pollera.. ¡un resultado top verdaderamente difícil de lograr!


Con pantalones ajustados, cintura ancha y alta y lacito con borlas al cuello, con look torero:



Es femenina y seductora con una pollera tubo a la rodilla, gargantilla y stilettos.
Romántico y bohemio, un look que no pasa de moda, este que ves aquí esta compuesto por femeninos pendientes, chambergo y pañuelo cerrando el cuello.




En la tendencia llamada Now, se acompaña con falda, botines y cinturón negros, y puede ir un poco larga y suelta como un minivestido, como vemos en este superoutfit que propone Givenchy



Para un rock&glam, mucha bijouterie, pantalones de cuero, botas o zapatillas de caña alta y guantes tipo mitón con tachas, lo mismo que el cinturón y el bolso, cuanto más grande mejor.
Para una salida sexy e informal, llevala con shorts, aros, collar XXL, tobillera y clutch.
Aquí abajo, Olivia Palermo compone un interesante outfit con la camisa por fuera de los shorts, con bib de mostacillas color plata, gafas, bolso gigante y balerinas metalizadas



Para una fiesta, camisa de gasa con chabot, falda larga en satén, encaje o brocato, cinto negro que logrará un dramático contraste, aros pegados y gargantilla de brillantes.




Para la cena de negocios o el cocktail, va bien con un traje negro,  moño, zapatos peep toe y un sobre o clutch.
Evitá...
...el error de pensar que es demasiado sencilla y en acompañarla con toda clase de complementos que le restan estilo.


...los accesorios en exceso, porque le quitan estilo y frescura. Sé minimalista: guardar la coherencia de tu outfit es esencial para que tu C.B. sea ese clásico que ha conquistado un lugar de relevancia en tu guardarropas y que llevas puesto con gusto. Aquí abajo, un sencillísimo pero impactante arreglo:




Para verte realmente elegante evitá llevar debajo de la camisa una camiseta o un top. La camisa se ve impecable cuando debajo de ella sólo hay un buen sujetador y tu piel. Este superclásico de todos los guardarropas cumple a la letra ese slogan de... menos es más!