viernes, 3 de febrero de 2012

¡Un cuello para tu outfit, please!


Un cuello de bolitas plásticas, cristales coloridos, placas de metal o de cuero sintético... tiene la onda retro interesante y sin límites para la imaginación... ¡tiene algo de los fabulosos cincuenta!
Un ejemplo: Nicole Kidman, fashionista incorregible sobre todo con las joyas, sobre un sencillo LBD lleva un collar impensable como tal si no fuera porque se compone de un exquisito tejido de cristales y es independiente del vestido.


Aunque en tiempos de crisis, mi abuela Galatea descosía el cuello gastado de la camisa, volvía  hacia el exterior su interior todavía impecable y lo volvía a coser. Y la camisa "tiraba" por lo menos dos añitos más. El cuello limpio y almidonado era un ítem importantísimo para una presentación adecuada, de modo que si había miseria... ¡no tenía que notarse!
En cambio estos cuellos se ponen por encima de tus outfit casi como un collar y por supuesto que pueden relookear tus camisas, sweters, vestidos o... ¡¡¡lo que quieras en dos minutos!!!

Un cuello sobre la piel...¡es un collar!

Al revés de mi abuela, que salvaba la camisa dando vuelta el cuello, se trata sólo de cuellos de camisa con originales toques de brillo y bijou. Recuerdan aquellos cuellos duros de antaño pero... ¡vamos! justamente sirven para burlarse de todo tipo de almidonamiento y etiqueta, y las prendas estilo vintage son especiales para eso.

Brocato de terciopelo y un ligero bordado de strass.


Dorado, brillante y rígido,  calado en su contorno como una puntillita: delikatessen pret a porter.
Este modelo enteramente bordaro en bolitas plateadas no deja dudas de que se trata de un collar... y oficiará ¡de cuello camisa!


Hablando de los límites de la imaginación o del formalismo... ¿Notaste los gatitos estampados en las puntas del cuello y la cantidad de pins que adornan este ceremonioso cuello blanco? 
Dale rienda suelta a la expresión.

Un antecesor del collar-cuello: de Chanel, 1950


Otro ancestro, confeccionado por la boutique ya inexistente de Coppola e Toppo, en Milán. Aproximadamente de la misma época.


He aquí sin duda el más original e innovador, y el que más me gusta. Colección Lanvin.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Vestir bijoux

¿Qué hay de nuevo en este loco siglo XXI?
Sensuales revestimientos subrayando ciertas zonas del cuerpo, las bijoux han migrado de las prendas hacia la piel: ellas son la prenda misma o se aplican directamente sobre el cuerpo y hacen brillar la desnudez.
Mirá. Mira y verás...
La tendencia ya ha sido relevada por los grandes diseñadores de bijoux.


Una blusa o chaleco-bijou: lindo, ¿no?



Una red-bijou multiuso.


Sandalias-bijou de Lanvin


Detalle de las sandalias y pollera hecha con red metálica y acrílica.


Un chaleco y otros vestidos.


Corsage-bijou... ¡sin tela!


Bijoux en las manos, sin pulseras ni anillos 


Las bijoux de encajes y brillantes sobre la piel terminan el vestido  


Un rostro trasmutado con pequeños brillantes a modo de máscara

Y el brillo de tus ojos...

Muy sugerentes todas, ¿no es cierto?

Carnavales: más sexies con antifaz



El carnaval es una antigua fiesta cuyo significado es la culminación y renovación del tiempo sagrado. De hecho, durante esos días se suspenden casi todas las reglas cotidianas y el tiempo se vive intenso y profano.
Las máscaras no solo sirven para otorgar una nueva identidad y proteger así de las habladurías la conducta del portador, una conducta de licencia moral otorgada por el carnaval. Aunque tu disfraz tenga gran encanto y pueda ser muy glamoroso, la máscara refuerza la mirada y añade la exacta dosis de misterio que refuerza la atracción y el sex-appeal. Casi casi diría que el glamour de los carnavales no está en cómo te vistas tanto como en la máscara y la forma en que la lleves...


Una máscara que contiene un antifaz pintado en color rojo.


Inocente, apetesible e indefensa, esta muñequita de carne y hueso parece lista para desear.
Y lo logra con apenas una puntilla ancha de encaje sujeta alrededor de la cabeza con un moño de raso negro vuelto hacia un lado.


Con apenas un pañuelo negro de gasa ya tendrás este sugerente look "pirata"...  ¿haría falta agregar algo más?



Adelantada: puntilla de guipure sobre el hermoso rostro de Awdrey Hepburn. Batman caería en picada a los pies de esta fulminante Gatubela retro.


Esta es fácil y muy tentador: un pañuelito o rectángulo de encaje sobre los ojos con dos puntas anudadas alcanzan para convertirte en ¡la super chica-murciélago del baile!   


Moderna máscara barroca y asimétrica en cartapesta, encajes y abalorios enteramente dorada.
Sobre el perfil izquierdo se recorta la silueta de una mariposa.


Tentadora transparencia de este antifaz de encaje gris a juego con el inquietante vestido de cortesana.


Y si todavía no te convenció el glamoroso misterio que crean, aquí va una máscara blanca que resalta la mirada cubriendo casi todo el rostro mucho más afrancesada, ultrafemenina, enigmática y chic. Esta portentosa máscara que corona y contiene el peinado fue diseñada en encaje blanco para Lady Gaga.


¿Convencida ahora?